¿QUÉ ES EL TAN MENCIONADO EGO?
El EGO es simplemente una forma de entendernos y atendernos a nosotros mismos, al mismo tiempo que entendemos y atendemos al mundo que nos rodea. En la mayoría de los círculos espirituales, el ego tiene una mala reputación. La razón de esto es que el ego, hasta cierto punto, es el principio en nuestra psiquis que nos separa unos de otros, mientras que el espíritu es el principio que nos muestra que no existe tal separación. A veces, el ego lo representan como una figura casi demoníaca que nos impide darnos cuenta de nuestra verdadera naturaleza… Pero en su forma más básica, el ego es simplemente una herramienta que nos ayuda a organizar los diversos aspectos de nuestra personalidad para que podamos funcionar en este mundo. En este sentido, el ego es simplemente una forma de entendernos y atendernos a nosotros mismos al mismo tiempo que entendemos y atendemos al mundo que nos rodea. El ego es una herramienta que usamos para navegar por el mundo. Quizás el problema es que el ego a veces se sale de control. Esto sucede cuando el yo superior pierde el control de la psique. La psique luego cae bajo el liderazgo del ego, una entidad que nunca tuvo la intención de dirigir. El ego está destinado a estar definitivamente al servicio del yo superior. Cuando esta relación está funcionando, el ego es un intermediario útil que representa a todo el yo, pero sin pensar que es todo el yo. Entonces, es casi como si el ego fuera el yo pretendiendo juguetonamente ser la entidad separada llamada «yo». Como un actor, el ego juega los roles que el mundo nos pide que hagamos para ser parte del programa. De esta manera, el ego puede ser una herramienta que nos permita estar en el mundo pero no ser de él. Mientras estemos en contacto con nuestro YO SUPERIOR, nuestros egos no son una amenaza. Son simplemente herramientas útiles al servicio del espíritu. Mantenemos nuestro ego bajo control cuando alimentamos continuamente nuestra conciencia de quiénes somos realmente. Entonces nuestros egos son libres de servir sin intentar gobernar ineficazmente. Es saludable tener ego, pero como todas las cosas en la vida, el ego funciona mejor cuando está en EQUILIBRIO y ARMONÍA con todo tu SER.
