La felicidad no es vivir con euforia: Es vivir con Paz! Es saber que ya tenemos todo lo suficiente, aprovecharlo y agradecer por ello. Acaso no fue esto lo nos trató de enseñar el pasado año? Es disfrutar de la sencillez de tu cotidianidad: una conversación, una caminata, una pieza musical y sobre todo el Silencio. Quien no ha sabido habitar el silencio, desconoce su paz. Esa paz es el núcleo de la energía de Amar, a la que podemos llamar Dios, inconsciente Luminoso, o como se guste. La felicidad es una paz que solo se encuentra en tiempo presente; no podemos ir a buscarla al pasado ni esperar a que llegue con el futuro. Aprender a ser feliz con quién tu eres, y con lo que sea que tengas o dejes de tener en tu vida. La felicidad es paz que solo se encuentra en lo profundo de ti. No es una Paz estática, es Paz creativa sostenida en un centro que es Certeza. Estar en Paz contigo mismo, es la forma verdadera de Vivir, y esa es una clase de felicidad que no tiene la euforia que tanto es buscada y que nunca sacia. Busca pues, esa felicidad auténtica que sacia y nutre desde la raíz.