Para saber si necesitas consumir vitamina C, detecta cualquiera de estas señales:
- Tu sistema inmunológico está débil. La falta de vitamina C provoca que te enfermes rápido y continuamente.
- Heridas que tardan mucho tiempo en sanar.
- Niveles de estrés alto.
- Cambios de humor constante.
- Falta de energía y depresión.
- Irritabilidad y estado de ánimo variable.
