“Nadie se va del todo, te quedas aquí entre las flores que yacen encima de tu tumba, te quedas aquí en el viento que lleva partículas de tu ser, te quedas aquí entre las raíces de esos árboles que dan cobijo y asilo a las aves, te quedas aquí aún floreciendo, y te quedas también ahí en el firmamento, viajando entre cometas, te quedas ahí en el inmenso universo volviendo a ser polvo de millones de estrellas.
No nos vamos, ni aún yéndonos”.
Autor Anónimo
