¡LA FE ES LA BASE DE TODOS LOS MILAGROS!
La fe ve lo invisible, cree lo increíble y recibe lo imposible. La fe, en términos bíblicos «es plena certeza de que lo que esperamos ha de llegar, es el convencimiento absoluto de que hemos de alcanzar lo que ni siquiera vislumbramos»
(Hebreos 11:1).
